Picor vaginal: Principales causas y tratamiento

¿Qué es el picor vaginal?

El picor o prurito vaginal es una sensación desagradable que se caracteriza por malestar en la zona vaginal y/o vulvar que implica la necesidad de rascado para aliviarlo.

¿Cuáles son las principales causas del picor vulvo-vaginal?

Las principales causas del prurito vulvo-vaginal son las infecciones vulvovaginales. Estas infecciones pueden estar producidas por distintos microorganismos: hongos, bacterias, virus… Aunque también puede producirse prurito vaginal por otras enfermedades cutáneas: psoriasis, dermatitis, irritación de la piel…

Infecciones vaginales

• Candidiasis vulvovaginal

La vulvovaginitis por cándida es la segunda causa de infección vulvovaginal más frecuente, seguida por la vaginosis bacteriana.

Los agentes causales son distintas especies de hongos, siendo la más frecuente la especie Candida, un microorganismo que se encuentra en el área genital de forma normal en el 10-50% de mujeres en edad reproductiva. La cándida más frecuente que produce estas infecciones es la Candida Albicans.

• Síntomas de la candidisis

Prurito vulvar y vaginal, secreción vaginal abundante de color blanquecino-amarillento espesa, enrojecimiento de genitales, ardor vulvar, dolor con las relaciones sexuales…

• Causas

Entre los factores desencadenantes se encuentran: la toma de antibióticos al producir desequilibrio en la microbiota vaginal, diabetes mal controlada, altos niveles de estrógenos (embarazo, uso de anticonceptivos…), estados de inmunosupresión.

• Vaginosis bacteriana

Es la infección vaginal más frecuente. Se considera una alteración del equilibrio de la microbiota genital: se produce una disminución de lactobacillus vaginales, lo que provoca aumento del pH vaginal que produce aumento de bacterias.

• Síntomas

Prurito vulvovaginal, aumento de flujo de color grisáceo y maloliente, inflamación genital. Hasta en un 50% de los casos serán asintomáticas.

• Causas

Son factores de riesgo todos aquellos que alteren el normal equilibrio de la flora vaginal: tabaquismo, duchas vaginales, múltiples parejas sexuales, uso de dispositivos vaginales (tampones, copas menstruales…)

• Herpes genital

La infección está causada por el virus herpes simple, tanto el tipo 1 como el 2 pueden producir herpes genital, aunque se asocia más frecuentemente el tipo 2.

• Síntomas

Quemazón vulvar producido por la aparición de úlceras vulvares muy dolorosas y pruriginosas. Inflamación de adenopatías inguinales.

• Causas

Es una infección de transmisión sexual, que se produce al contagiarse del virus herpes simple 1 o 2.

• Infección por tricomona

Está causada por un protozoo que se transmite por vía sexual.

• Síntomas: el 80% de los casos son asintomáticos, pero en los casos sintomáticos puede aparecer prurito, flujo espumoso, dolor al orinar y al mantener relaciones sexuales…

Atrofia vaginal

La atrofia o sequedad vaginal se produce por el descenso de los estrógenos que sucede en la menopausia. Esto condiciona que la piel vulvar se convierta en una piel más frágil, adelgazada y además se producen cambios anatómicos en la vagina y en el introito vaginal, produciendo un estrechamiento del mismo, lo que produce picor y molestias en la zona.

• Síntomas: sequedad vaginal, prurito vulvovaginal, dolor con las relaciones sexuales…
• Causas: la principal causa de la atrofia es la disminución estrogénica que se produce en la menopausia, que produce cambios en la piel y en el aparato genital femenino.

Vulvitis irritativa

Se puede producir una inflamación de la piel vulvar por distintos alérgenos o sustancias irritantes.

• Síntomas: prurito genital, inflamación y enrojecimiento vulvar, ardor, molestias con las relaciones…
• Causas: productos irritantes como geles, depilación íntima, ropa interior, ropa ajustada…

Disbiosis vaginal

No se trata de una infección vaginal, sino de la alteración de la flora vaginal debido a cambios en su composición, en la distribución, en cambios en su funcionamiento o actividades metabólicas.

• Síntomas: prurito vaginal, flujo alterado, ardor vaginal…
• Causas: similares a la vaginosis bacteriana, tabaco, alcohol, duchas vaginales, malos hábitos higiénicos, desequilibrios hormonales…

Diagnóstico del prurito vaginal

El diagnóstico del prurito genital es clínico. Para esclarecer la causa, habrá que realizar una exploración física en la que se visualice tanto el área vulvar como la vaginal. Según los hallazgos se pueden tomar muestras de flujo para su análisis.

Tratamiento del prurito vaginal

Dependiendo la causa del prurito, el tratamiento puede ser:

• Antifúngicos: si se trata de una candidiasis
• Probióticos: en el caso de las vaginosis o disbiosis para mantener la flora vaginal en equilibrio
• Antibióticos: si se confirma infección por bacterias o en el caso de algunas vaginosis bacterianas
• Anti herpético: en el caso de infección por virus herpes
• Cremas hidratantes: en el caso de vulvitis irritativas, atrofia…
• Estrógenos locales: en el caso de atrofia genital

Consejos para prevenir el picor vaginal

Para evitar el prurito vaginal es aconsejable:

• Mantener una adecuada higiene vulvar sin exceso de la misma y evitando el uso de cosméticos vaginales
• Evitar el uso prolongado de protectores de braguitas, compresas, pañales…
• Uso de ropa interior de algodón para favorecer la transpiración
• Evitar uso de ropa ajustada
• Evitar hábitos tóxicos como alcohol y tabaco
• Realizar una alimentación saludable, evitando exceso de azúcares
• En temporada de baño, evitar la humedad y cambiar frecuentemente el bañador

¿Cuándo debo acudir al ginecólogo?

Se debe acudir al especialista si se tienen síntomas de prurito vaginal mantenidos (>1-2 días) para que se pueda realizar una exploración y un tratamiento dirigido.